He leido que desde el Golden Gate se han lanzado mas de 1000 personas buscando su otra mejor vida. Pero SFO no parece una ciudad triste, de hecho es todo lo contrario. Podria decir que se parece bastante mas a la vida mediterranea que a la americana. Picnic en la playa, con copa de vino incluida. Casas victorianas con ventanales a la calle en las que uno, subido al mitico tranvia espera descubrir los secretos de este tipo de vida tan naif.
Aqui todo el mundo hace deporte. Han desaparecido los cachalotes que hemos visto hasta ahora y todos son estilizados y divinos. En la bahia haciendo footing y empujando un carro no van las madres, van las abuelas, y a muy buen ritmo.
Aqui, por fin, he comido algo que no fuese ensalada cesar (de mil maneras) y algo muy parecido a una tapa de boquerones en vinagre. Abundan las tiendas guays de productos organicos, vegetarianos y sanos, por supuesto a su correspondiente precio.
Como siempre, para nosotros lo mas comodo es descubrir la ciudad con bici, en este caso, a pesar de las cuestas. Bici para recorrer la bahia, para cruzar el Golden Gate y llegar a Sausalito, para subir a Lombard (la calle mas empinada del mundo, dicen) y dejarnos caer.
Y por la noche, a Russian Hills, que me recuerda mucho a Palermo Chico, en Buenos Aires, con tiendas fuera de circuito y a la ultima, locales donde tomar una copa de vino con algo de comer y vidilla, mucha vidilla, parecido a Espanha, con gente tomando una copa en la calle.
Creo que podria vivir aqui...
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario